

Murió a los 95 años de edad, en Itaipava, región serrana de Rio de Janeiro, víctima de una neumonia, el ex-luchador Helio Gracie. Una de las mayores leyendas de las artes marciales de todos los tiempos, Helio Gracie ayudó a lanzar el estilo brasilero de luchar en jiu-jítsu, conocido internacionalmente como Brazilian Jiu-Jitsu.
Helio Gracie deja a su esposa, Vera, y sus hijos Rorion, Relson, Rickson, Rolker, Royler, Royce, Rherica, Robin y Ricci.
RIO DE JANEIRO, 29 ene (Xinhua) -- El máximo ídolo del jiu jitsu en Brasil, Helio Gracie, fue sepultado hoy en la ciudad serrana de Petrópolis, a unos 50 kilómetros de Río de Janeiro, luego de fallecer en la mañana de este jueves a los 95 años, victimado por una neumonía .
Gracie creó un estilo propio de preparación de luchadores, basado en el principio de que la técnica es más importante que la fuerza, que se tornó conocido internacionalmente como "Jiu Jitsu Brasileño" y fue difundido por sus hijos, en especial Rickson Gracie y Royce Gracie, considerados verdaderas legendas del deporte.
Uno de sus combates más famosos del patriarca de la familia Gracie ocurrió en 1955, en Río de Janeiro, cuando Helio Gracie, que en ese entonces pesaba 63 kilos, resistió, durante tres horas y 45 minutos en el combate más largo de la historia de ese deporte, hasta ser derrotado por el gigante japonés Masahiko Kimura, de 100 kilos, uno de los astros de aquel entonces, quien le quebró el brazo al brasileño.
Gracie creó un estilo propio de preparación de luchadores, basado en el principio de que la técnica es más importante que la fuerza, que se tornó conocido internacionalmente como "Jiu Jitsu Brasileño" y fue difundido por sus hijos, en especial Rickson Gracie y Royce Gracie, considerados verdaderas legendas del deporte.
Uno de sus combates más famosos del patriarca de la familia Gracie ocurrió en 1955, en Río de Janeiro, cuando Helio Gracie, que en ese entonces pesaba 63 kilos, resistió, durante tres horas y 45 minutos en el combate más largo de la historia de ese deporte, hasta ser derrotado por el gigante japonés Masahiko Kimura, de 100 kilos, uno de los astros de aquel entonces, quien le quebró el brazo al brasileño.