Un total de 54 árbitros españoles y franceses, diez de ellos internacionales, participaron este sábado en Jaca en el seminario de arbitraje y entrenadores organizado por la Federación Aragonesa de Judo y Deportes Asociados. El acto contó con la participación del presidente de la Federación Española, Juan Carlos Barcos, quien a su vez es el director de arbitraje de la Federación Internacional de Judo.
JACA.- En el marco de este encuentro en Jaca, Barcos expuso las conclusiones del último seminario europeo de arbitraje celebrado en Dubrovnik (Croacia), dando paso a una mesa redonda con los participantes, entre los que se encontraban árbitros, competidores y federativos. El seminario contó con la participación de árbitros aragoneses, navarros, vascos y franceses, además de cuatro componentes de la comisión nacional de arbitraje, encabezados por el propio presidente de la federación. Se dieron cita siete árbitros mundiales, alguno incluso con actuaciones en finales de Juegos Olímpicos, y tres árbitros continentales. Además participaron entrenadores y competidores, entre ellos los binefarenses Daniel Pions y Raúl Clemente.
Barcos, al término del seminario, explicaba a este periódico que actualmente, desde la federación internacional se está buscando "un nuevo impulso" para hacer el reglamento del judo "más fácil y comprensible para todo el mundo". En este sentido, el trabajo está en conseguir que "el judo sea cada vez más puro, no podemos mezclar artes marciales", comenta. Todo ello pasa porque "sea visualmente más comprensible y las reglas de arbitraje más simples".
RESPETO AL ÁRBITRO
Los posibles cambios no se podrán hacer efectivos hasta después de los próximos Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero Barcos reconoce que "es importantísimo hacer algunos cambios que hagan que el judo sea más atractivo para todos". Uno de los asuntos estrella del seminario del sábado fue el nuevo sistema CARE "que nos permite, en situaciones de complicación, tomar una decisión a través del video". El sistema ya se está poniendo en práctica y "esa justicia se está viendo en todos los campeonatos que estamos acudiendo" explica Barcos, porque "pueden solucionar problemas que el ojo humano no tiene capacidad de captar".
No obstante, el máximo responsable internacional del arbitraje de judo recuerda que es un deporte donde "se respeta mucho al árbitro". Ello se debe, por un lado "a un código moral del judo que es básico para practicarlo". Pero además, comenta, "casi todos los árbitros han sido competidores, entrenadores, directores de club… y al final hay una simbiosis entre los participantes, el árbitro y el público". Con todo ello, explica "el porcentaje de respeto al árbitro es altísimo" y por consiguiente, "el arbitraje a nivel general está siendo muy justo". En nuestro país, explica el presidente, el nivel "es excepcional" y destaca a Aragón como una de las mejores. Considera que el arbitraje no es un problema y hay una gran cantera entre antiguos competidores y entrenadores que ven en el arbitraje una forma de seguir vinculados a su deporte.
CLEMENTE Y PIONS, DOS APUESTAS DE FUTURO
Con respecto al panorama actual del judo en España, el presidente de la Federación Española habla de las posibilidades de nuestro país en los próximos Juegos Olímpicos. En este aspecto, reconoce que "cada vez hay más dificultad para la calificación", porque el sistema para poder estar en unos juegos se basa "en un ranking con el que hay que acudir a muchísimas pruebas por todo el mundo". Ello, explica "es una cortapisa enorme a nivel económico y de mantener un nivel competitivo". Pero eso no acaba allí, porque "una vez calificados, conseguir una medalla es complicadísimo". Resumiendo, Juan Carlos Barcos reconoce que "quizá no clasifiquemos a muchos para Londres" pero confía mucho en los que puedan acudir y piensa que "quizá sí que saquemos una medalla".
Entre esos candidatos están los binefarenses Raúl Clemente y Daniel Pions. Barcos piensa que la clasificación de uno de ellos (no pueden clasificarse los dos) para Londres es complicada, dada su juventud y que la calificación para los Juegos "está ya muy avanzada". Aunque "sería un orgullo" que uno de ellos lo lograra, sí que está convencido de que "cualquiera de ellos podrá optar a los juegos de Río 2016". El presidente no duda en calificarlos como dos chicos "excepcionales". Para Barcos, son dos "excelentes competidores y personas que demuestran todo lo que el judo les ha enseñado en comportamiento con los demás, compañeros, entrenadores…".
Respecto a la salud del judo de base en España, el presidente de la federación explica que "hay una serie de niños trabajando muy bien". Un trabajo que "están demostrando en Copas de España con cuatro medallas en los últimos Campeonatos de Europa". Para Barcos, el principal problema al que deben hacer frente es que "el judo es un deporte muy duro que requiere una continuidad y un entrenamiento muy serio". Frente a ello, recuerda el presidente "los que están, están trabajando con mucha ilusión y hay una buena base que espero que se haga presente en los últimos años".
Asimismo, recuerda el buen trabajo de los clubes, traducido en el número de licencias. Aunque la crisis económica y la competencia de otros deportes se notan, el presidente de la Española considera que "el judo sigue teniendo gran importancia y base en colegios y clubes".
Barcos, al término del seminario, explicaba a este periódico que actualmente, desde la federación internacional se está buscando "un nuevo impulso" para hacer el reglamento del judo "más fácil y comprensible para todo el mundo". En este sentido, el trabajo está en conseguir que "el judo sea cada vez más puro, no podemos mezclar artes marciales", comenta. Todo ello pasa porque "sea visualmente más comprensible y las reglas de arbitraje más simples".
RESPETO AL ÁRBITRO
Los posibles cambios no se podrán hacer efectivos hasta después de los próximos Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero Barcos reconoce que "es importantísimo hacer algunos cambios que hagan que el judo sea más atractivo para todos". Uno de los asuntos estrella del seminario del sábado fue el nuevo sistema CARE "que nos permite, en situaciones de complicación, tomar una decisión a través del video". El sistema ya se está poniendo en práctica y "esa justicia se está viendo en todos los campeonatos que estamos acudiendo" explica Barcos, porque "pueden solucionar problemas que el ojo humano no tiene capacidad de captar".
No obstante, el máximo responsable internacional del arbitraje de judo recuerda que es un deporte donde "se respeta mucho al árbitro". Ello se debe, por un lado "a un código moral del judo que es básico para practicarlo". Pero además, comenta, "casi todos los árbitros han sido competidores, entrenadores, directores de club… y al final hay una simbiosis entre los participantes, el árbitro y el público". Con todo ello, explica "el porcentaje de respeto al árbitro es altísimo" y por consiguiente, "el arbitraje a nivel general está siendo muy justo". En nuestro país, explica el presidente, el nivel "es excepcional" y destaca a Aragón como una de las mejores. Considera que el arbitraje no es un problema y hay una gran cantera entre antiguos competidores y entrenadores que ven en el arbitraje una forma de seguir vinculados a su deporte.
CLEMENTE Y PIONS, DOS APUESTAS DE FUTURO
Con respecto al panorama actual del judo en España, el presidente de la Federación Española habla de las posibilidades de nuestro país en los próximos Juegos Olímpicos. En este aspecto, reconoce que "cada vez hay más dificultad para la calificación", porque el sistema para poder estar en unos juegos se basa "en un ranking con el que hay que acudir a muchísimas pruebas por todo el mundo". Ello, explica "es una cortapisa enorme a nivel económico y de mantener un nivel competitivo". Pero eso no acaba allí, porque "una vez calificados, conseguir una medalla es complicadísimo". Resumiendo, Juan Carlos Barcos reconoce que "quizá no clasifiquemos a muchos para Londres" pero confía mucho en los que puedan acudir y piensa que "quizá sí que saquemos una medalla".
Entre esos candidatos están los binefarenses Raúl Clemente y Daniel Pions. Barcos piensa que la clasificación de uno de ellos (no pueden clasificarse los dos) para Londres es complicada, dada su juventud y que la calificación para los Juegos "está ya muy avanzada". Aunque "sería un orgullo" que uno de ellos lo lograra, sí que está convencido de que "cualquiera de ellos podrá optar a los juegos de Río 2016". El presidente no duda en calificarlos como dos chicos "excepcionales". Para Barcos, son dos "excelentes competidores y personas que demuestran todo lo que el judo les ha enseñado en comportamiento con los demás, compañeros, entrenadores…".
Respecto a la salud del judo de base en España, el presidente de la federación explica que "hay una serie de niños trabajando muy bien". Un trabajo que "están demostrando en Copas de España con cuatro medallas en los últimos Campeonatos de Europa". Para Barcos, el principal problema al que deben hacer frente es que "el judo es un deporte muy duro que requiere una continuidad y un entrenamiento muy serio". Frente a ello, recuerda el presidente "los que están, están trabajando con mucha ilusión y hay una buena base que espero que se haga presente en los últimos años".
Asimismo, recuerda el buen trabajo de los clubes, traducido en el número de licencias. Aunque la crisis económica y la competencia de otros deportes se notan, el presidente de la Española considera que "el judo sigue teniendo gran importancia y base en colegios y clubes".